Dónde vivir en Canadá

Después de un primer artículo en el que hemos hablado un poco de la geografía de Canadá, es el momento de entrar en los detalles más prácticos para quien quiera instalarse en el país: En qué ciudades son mejores para vivir en Canadá, cómo desplazarse o aspectos de la vida cotidiana como la compra diaria, las cuentas bancarias o la compañía de teléfono.

Como en todos los países, elegir una ciudad para vivir en Canadá requiere tiempo, trámites y gastos, pero se puede decir que -en general- casi todo se resuelve de un modo bastante sencillo siempre que se disponga de los permisos, visados y autorizaciones correspondientes para residir en el país, con la única excepción -quizá- de buscar un alojamiento bueno, bonito y barato, que suele costar un poco más a las personas más exigentes.

Hay también que tener en cuenta, como decíamos anteriormente, que la enorme extensión del país hace que cada provincia sea un mundo diferente y que, en algunos casos, tengamos que hablar de reglas, costumbres o prácticas individuales dependiendo de qué provincia o ciudad elijamos para vivir en Canadá.

Principales ciudades para vivir en Canadá

Hay múltiples opciones geográficas para vivir en Canadá. La gran extensión del país implica largos desplazamientos si nos queremos mudar. Por tanto, entre las ciudades de Canadá hay que elegir con cierta calma antes de comprar el billete. La situación ideal es ir con un proyecto de vida cerrado y con un destino elegido para vivir en Canadá, pero si tenemos múltiples opciones podemos guiarnos por algunos factores más concretos para elegir una ciudad u otra.

Toronto es la capital económica del país y la ciudad de Canadá más poblada. Multicultural, comercial, extensa y muy activa. Es un buen punto de partida para empezar a vivir en Canadá. No es especialmente difícil encontrar trabajo en Toronto no cualificado -siempre que se tenga la documentación en regla-, pero cuesta hacerse un hueco en el mercado laboral cualificado (aunque en realidad esto sucede en prácticamente todas las profesiones y todas las grandes ciudades de Canadá). Cercana a Estados Unidos y bien comunicada, con un aeropuerto internacional importante. Turísticamente bastante pobre, aunque tiene las Cataratas del Niágara a pocos kilómetros. Inviernos fríos y veranos calurosos. Humedad por la proximidad del lago Ontario.

Entre las ciudades de Canadá, la multicultural Toronto es la más poblada.

Montreal es la capital de la región francófona de Quebec y el único punto de la región donde podría ser razonable intentar vivir en Quebec de modo bilingüe. De estilo y carácter más europeo que el resto de ciudades donde vivir en Canadá, con población casi totalmente bilingüe, joven y viva. Estéticamente bastante bonita. Las posibilidades de trabajar allí se reducen mucho si no se tiene un nivel al menos aceptable de francés, pero se multiplican para quien lo tiene. Inviernos fríos y veranos calurosos.

Montreal es, de las grandes ciudades de Canada, la que tiene más parecido con Europa.

Vancouver es una de las ciudades de moda donde vivir en Canadá. Moderna, estéticamente maravillosa, con paisajes espectaculares y zonas vecinas de alto valor ecológico y paisajístico. Volcada al Pacífico. Con influencia de actividades económicas modernas y pujanza de las tecnologías de la información, pero con una vida económica y laboral que va mucho más despacio que en otras zonas del país. Cierto aislamiento geográfico, con mucha distancia con el resto de ciudades importantes del país, aunque bien comunicada con la Costa Oeste de Estados Unidos. Enorme influencia asiática y mucha vida joven. El tiempo no es especialmente frío, pero suele ser húmedo y lluvioso.

Vancouver es una de las ciudades de Canadá que están de moda.

Otras ciudades de Canadá

Ottawa es la capital de Canadá. Es una ciudad administrativa y muy tranquila con algunas zonas muy agradables para el visitante, pero que por su carácter burocrático puede llegar a ser de las más aburridas donde vivir en Canadá. Está situada en la frontera de la región anglófona de Ontario y la francófona de Quebec, por lo que es posible hacer una vida bilingüe en ella.

El Parlamento de Canadá, con la Peace Tower en el centro.

Calgary y Edmonton son dos ciudades de la provincia de Alberta que están creciendo notablemente gracias a la industria del petróleo. Son ciudades de interior, con climas muy fríos y muy lejos de otras ciudades de referencia de Norteamérica. Disponen de aeropuertos muy decentes y muchos vuelos, pero viajar a otras ciudades importantes requiere muchas horas y dinero. Su atractivo como lugar donde vivir en Canadá está creciendo, ya que ofrecen buenas posibilidades de empleo, pero no consiguen atraer a suficientes trabajadores. Calgary es también un importante centro de deportes de invierno, con ciudades de esquí como Jasper o Banff a pocos cientos de kilómetros.

Finalmente, quedan otras ciudades que también merecen una mención como posibles destinos para vivir en Canadá. Las provincias del Este son especialmente tranquilas y agradables. El tiempo es aceptable, pero la actividad económica y las posibilidades de encontrar trabajo son reducidas. Halifax es su punto de referencia.

Por su parte, en las Praderas aparece Winnipeg, en la provincia de Manitoba, una ciudad relativamente importante, pero aislada en mitad de la nada. Y, finalmente, queda Saskatchewan, en el centro de las Praderas. Provincia agrícola donde las haya, con localidades pequeñas y aisladas y una necesidad importante de mano de obra cualificada en los sectores de ingeniería agrícola y operarios de maquinaria.

Se dice que, para quien quiera vivir en Canadá por un largo plazo y tenga dudas sobre dónde trabajar, la opción de trabajar en las Praderas (provincias de Alberta, Saskatchewan y Manitoba) es la más probable para obtener empleo y permiso de residencia en Canadá de forma rápida por la escasez de mano de obra.

En las grandes ciudades donde vivir en Canada, por su parte, es más fácil encontrar empleo no cualificado, pero resulta más difícil trabajar de un modo permanente. Sin embargo, los sacrificios personales en lo que se refiere a clima, actividad social o aislamiento geográfico hacen de esta opción la más dura desde el punto de vista personal.

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