En mi reciente viaje por las Montañas Rocosas de Canadá, pasé por Lake Louise, una de las áreas más populares del Parque Nacional de Banff, conocida por sus lagos, sus posibilidades de senderismo en un fantástico entorno natural y, también, por sus osos. Esto último suena muy bonito, pero en realidad supone un grave peligro que nos obligaba a todos los visitantes a saber qué hacer si te encuentras con un oso durante tu paseo.
Lake Louise es una pequeña localidad situada en las Montañas Rocosas de Canadá, en pleno Parque Nacional de Banff, a aproximadamente una hora al oeste de la localidad de Banff y a unas tres de Calgary, principal ciudad de la provincia de Alberta. En realidad, Lake Louise es un pequeño centro de alojamiento para turistas en la zona que consta de dos partes principales: el Village, donde se encuentra la parada de los autobuses, una pequeña zona de tiendas, la estación de ferrocarril, el albergue de juventud y algunos hoteles de montaña, y el Lake Louise propiamente dicho, el impresionante lago con el lujoso Hotel Fairmont en su orilla.
En los alrededores, hay fantásticas oportunidades de hacer senderismo y visitar parajes naturales como el propio Lake Louise o el también cercano Lake Morraine. Hay, también, un teleférico desde el que se tienen vistas impresionantes de toda la zona y desde donde podemos contemplar a los osos de la zona con tranquilidad.
Lake Louise es una zona de montaña que atrae a muchos aficionados al senderismo. Desgraciadamente, es también el hábitat natural de muchos osos negros y grizzlies, por lo que de vez en cuando se producen encuentros entre ambos. La mayor parte de las veces acaban en nada, pero siempre hay que saber qué hacer si te encuentras en el campo con alguno de estos plantígrados.
Para ello, Parques Naturales de Canadá editó un fantástico y curioso folleto que no debería faltar entre las lecturas obligatorias de quien quiera irse a disfrutar de los senderos de las Rocosas. El folleto, titulado Bears and People puede encontrarse en el centro de interpretación de la naturaleza del Village de Lake Louise, así como en hoteles y albergues de la zona.
Los osos y las personas
Las Montañas Rocosas canadienses son el hábitat natural de los osos negros y los grizzlies, por lo que no es extraño que en cualquier momento puedas encontrarte con uno de ellos durante tus paseos por la zona. Puede ser en plena montaña o, incluso, en las proximidades de las zonas habitadas, donde los osos se acercan de vez en cuando en busca de comida en las basuras.
Por muy bucólico que pueda parecer ver a un oso tan de cerca, lo más inteligente que podemos hacer cuando nos encontramos con un oso es evitarlo. Si no nos queda más remedio que encontrarnos con ellos cara a cara, tendremos que saber un poco más de cómo se comportan los osos para evitar un grave peligro.
Pero no son sólo los humanos los que pueden verse en peligro al encontrarse con un osos. Los propios osos son muy sensibles a la aparición de humanos en sus hábitats, por lo que es importante que les dejemos su propio espacio para garantizar la conservación de la especie.
Cómo evitar un encuentro con un oso
1.- Haz que se te oiga: Los osos tienen que saber que estás en la zona para poder evitarte. Si tienes la sospecha de que puede haber osos en la zona donde te estás moviendo haz ruido para que sepan que estás ahí: da palmadas, canta o habla alto. Especialmente peligrosas son las zonas cerca de arroyos, vegetación densa o con arbustos de bayas. Hay personas que se atan campanillas o cascabeles en la ropa o la mochila para hacer notar su presencia.
2.- Busca señales de su presencia: Si hay huellas, marcas de haber cavado o troncos girados hace poco tiempo, son señales de que puede haber osos en la zona. En ese caso, abandona la zona.
3.- Camina en grupo: Cuanta más gente vaya junta, menos posibilidades hay de que se acerque un oso. La recomendación es caminar por los senderos en grupos de cuatro personas o más. En algunas épocas del año, las propias autoridades prohíben o limitan el acceso a algunos senderos si hay presencia de osos en la zona.
4.- Utiliza los senderos y caminos señalizados.
¿Qué pasa si te encuentras con un oso?
Si el oso no te ha visto, intenta abandonar la zona de forma silenciosa y sin llamar su atención.
Si el oso te ha visto, ten en cuenta que puede intentar asustarte gruñendo o con gestos. Reacciona con calma. Gritos o movimientos bruscos pueden provocar un ataque. Aunque parezca estúpido, puedes probar a hablar con el oso. Habla de forma tranquila, pero firme, para que se de cuenta de que eres un humano y no otro animal. Aléjate caminando lentamente, nunca corras porque podría perseguirte y no tires tu mochila, ya que podría ayudarte a protegerte en caso de un ataque.
Si el oso se acerca a ti
El oso puede acercarse a ti de dos maneras: defensiva o para atacarte. Si eso ocurre, lo más normal es que sea defensivo, pero tienes que estar preparado para cualquier cosa.
Si es defensivo, el oso está intentado proteger a sus oseznos o se ha asustado por tu presencia y te ve como una amenaza. Parecerá asustado, pero feroz. En ese caso, intenta no mostrarte agresivo, habla con voz tranquila, camina lentamente hacia atrás en el momento que el oso haya dejado de avanzar hacia ti; si no se detiene, quédate de pie, sigue hablando y utiliza tu spray para osos.
Podría ser que el oso te tocara de alguna forma. En ese caso, déjate caer al suelo y hazte el muerto. Quédate quieto y espera a que el oso se vaya. Túmbate sobre tu estómago con las piernas separadas y coloca las manos cruzadas detrás de tu nuca. Con esta posición tendrá menos posibilidades de darte la vuelta y protegerás tu cara y el cuello. Este ataque suele durar menos de dos minutos. Si se prolonga más tiempo, es que el oso tiene otras intenciones. Entonces te tocará contraatacar y defenderte.
Es menos habitual, pero también puede pasar, que el oso vaya a por tu comida o quiera hacerse el fuerte y mostrar su dominio del territorio donde te encuentras. Es muy, muy extraño, pero también puede tomarte como su presa. En ese caso, el oso se lanzará a por ti con su cabeza y sus orejas hacia arriba. Si te ocurre eso, habla en voz muy firme, sal del camino del oso y busca refugio en un coche o lugar cubierto – si te sigue y no hay sitio donde refugiarse- párate y quédate en el sitio. Grita y actúa agresivamente intentando intimidarle y, si se acerca mucho, usa el spray para osos.
Si acampas en el bosque
Hay dos cosas que debes tener en cuenta sobre los osos si acampas en el bosque: limitar el impacto ambiental evitando encuentros y gestionar de la mejor manera la comida, su olor y la basura.
Para ello, acampa sólo en las zonas designadas. Si eliges otro lugar para acampar, almacena tu comida y tus utensilios para cocinar a, al menos, 50 metros de tu tienda y asegúrate de tener buena visibilidad para poder ver a los osos si se acercan. Cuelga tu comida a, al menos, cuatro metros de altura del suelo.
No acampes o cocines cerca de arroyos, pasos de animales o zonas de arbustos de bayas y lava todos tus utensilios de cocina nada más acabar de utilizarlos. Arroja el agua con el que los has lavado a más de 50 metros de la tienda. No guardes comida o bebidas cerca de ti y deja cualquier perfume, colonia o cosméticos con olor fuerte en casa.
Respecto a la basura, no la quemes o entierres. Empaquétala y déjala alejada de la tienda.
Comments are closed.